0 comentarios

¡Qué caro es el tiempo!


¿Cuánto estás dispuesto a pagar por un minuto más?

Dependiendo del momento, uno invertiría todo el premio de “Míster orejas bonitas” en un ratito más de Domingo. Otras veces, donaría el 4º premio del mundial de lanzamiento de hueso de aceituna para la causa de que los días duraran solo 23, 22 ó 21 horas (son unos cuantos, esos días a los que les sobran horas).

Últimamente soy de los que necesitaría 3 ó 4 horitas diarias para irme a la cama pensando que he hecho todo lo que quería o necesitaba hacer para aprovechar el día al 100%.

Cuando a uno le falta tiempo es cuando valora más esos pequeños instantes de placer tantas veces pasan delante nuestro sin que nos demos cuenta.

20 minutos de siesta, 40 minutos para ver una serie en el sofá con unas patatillas, 120 minutos para ir al cine, 60 minutos para aprender a tocar la guitarra, 40 minutos para hablar con los amigos, 30 minutos para llamar por teléfono, 60 minutos para pasear con tu chic@, 30 minutos para tomar una caña, 30 minutos para escuchar música, 20 minutos para cocinarse un buen solomillo…

He pedido un crédito de minutos extra al Señor del Tiempo, que pienso gastar desde el Lunes. Ya me pensaré cómo devolverlo. Así que, si vuestros días empiezan a hacerse eternos y os dais cuenta de que ya no son de 24 horas, sino de 25… es que la negociación ha ido bien. Ya sabréis a quién agradecérselo o a quién odiar ;)

0 comentarios

Canción de la semana (XLVI)

La primera canción de la semana de la "nueva etapa" he decidido que sea esta. Es uno de los éxitos del grupo Revólver y una de las primeras canciones que grabé en un casette con la grabadora de mi padre cuando la ponían en la televisión.
Os gustará. Dedicada ;)


1 comentarios

Because change happens

Consultando la fecha de la última entrada (sí, la dichosa canción de Rosana), me he dado cuenta de cómo pasa el tiempo. Era consciente de que tenía que actualizar un poquito esto, pero nunca pensé que hacía 4 meses que no decía ni mú. Si algún@ me odiáis por ello…lo entiendo perfectamente.

El motivo de mi ausencia prolongada se lo voy a achacar casi al 100% a mi nuevo trabajo. Desde Noviembre estoy siguiendo un magnífico horario de 9:00 a 22:00 que me impide realizar cualquier otra actividad que no sea programar en JAVA (os lo aconsejo, lo recomiendan todos los médicos para desconectar de todo. Java, Java y más Java). Por supuesto que podía haber hecho algo de 22:00 a 24:00 cualquier día de estos 4 meses, pero ahí entra mi punto de vagancia, que forma parte de mi carácter.
He decidido cambiar un poco de look esto, que el otro ya olía, y estoy pensando sobre los contenidos que incluir a partir de ahora. Os adelanto que la base será la misma, experiencias personales, reflexiones y alguna que otra canción de la semana. Desterraré alguna sección que no ha tenido mucho éxito e intentaré añadir algo novedoso. ¡Ya me contaréis qué os parece!

Aparte de los cambios en el blog, este mes está siendo de cambios en algunos otros aspectos. Uno de ellos ha sido la residencia. Desde ayer mismo, he cambiado mi vieja morada en Madrid por otra más pequeñita, pero igual de chula, también en la capital. “¡Invitaícos quedáis!”

Bueno, pues dicho esto, ¡vamos al lío!